jueves, 5 de julio de 2018

Cotidiano










Escucho desde casa la camioneta que busca comprar muebles, electrodomésticos, chucherías digo yo. Típico en los pueblos del Interior. La Capital también es un pueblo creánme. Después de todo he vivido en Almagro, Caballito y Flores. Y he trabajado mucho en el barrio de Belgrano. Sí sabré.


La City es bulliciosa, enérgica, nerviosa, stressante. Si buscás paz podés hallarla pero...en general la Ciudad de Buenos Aires es ruidosa y movediza. Como los cabellos de una Medusa.


Pero es hermosa , cautivante, decadente, rica.Si no encontrás trabajo acá no lo encontrás en ningún lugar de Argentina.



Amo a esta ciudad que me dio mucho y nada. Y a la que le dí mucho. Y a la que le debo mucho de mi formación, educación sentimental, mi viaje de aprendizaje fue en la Ciudad de Buenos Aires, terror, moda, esfuerzo,trabajo, vida como soltera, como novia, como pareja, como amiga, como compañera.



Se deterioró es cierto. Conocí el último coletazo de la riqueza en esta ciudad, las luces,la esperanza. Todo eso se desvaneció luego de la Dictadura. Y cada vez la ciudad se volvió menos esplendorosa, chic, europea. Y no hablo de la riqueza en términos de ser sino en términos de cultura, educación, de formación, de esfuerzo, de cultura del trabajo, de nación.



Fotografía, barrio de Abasto.

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