sábado, 11 de mayo de 2019

Sobre Charles Bukowski y su obra









"Desagradable, grosero, soez, machista, peleador y borracho, un hombre que escribía con el olor nauseabundo de las cloacas y el aroma “del asesinato”, como alguna vez lo dejó plasmado en sus relatos. Escritor tan controvertido y criticado como admirado, de pluma directa y sencilla como los golpes de los boxeadores fracasados que alguna vez retrató, Charles Bukowski creó una obra de más de cincuenta libros –entre novelas, cuentos y poemas–, en la cual los temas circularon siempre por una misma (y oscura) avenida. Pasaron por allí las clases sociales más bajas de Estados Unidos, los invisibilizados por el mismo sistema de gobierno, los trabajadores y las trabajadoras explotados, los desclasados que vivían entre la drogadicción, el alcoholismo, la violencia sexual y la necesidad urgente de escapar de una pobreza marcada por las necesidades básicas pero, a su vez, por una cultura del consumo y el triunfo desmedido, como es la estadounidense.



Algo que rodea todo el tiempo a los personajes de Bukowski (y a él mismo, bajo su alter ego Henry Chinaski) es una profunda soledad. Hombres y mujeres que no se configuran como solitarios románticos o vagabundos en busca de un destino, como aparecen en los libros de su contemporáneo Jack Kerouac. En Bukowski la soledad es parte estructural de esas personas sin rumbo, sometidas a la explotación, que no tienen un ápice de esperanza, pero que al ser retratadas por el autor se convierten en una instantánea de la sociedad en la que viven."


Leandro Albani de "El furgón ", portal de noticias de la Revista Sudestada

No hay comentarios:

Publicar un comentario