Paseo por Av Corrientes hoy. La vidriera de la capital del país. Pizzerías famosas, teatros, turistas a full. Y fisuras , gente lumpen que convive con los demás. Colchones, gente en pata, muy sucia. Y glamour
Y librerías.Amo esto amo tremendamente esto. Obvio salgo con libros. Unos cuentos de Gogol y oh hallazgo un libro viejo de José Enrique Rodó "Los motivos de Proteo " tengo cientos de libros para elegir que Yourcenar, que Ginzburg, que Pasolini, que Pavese que Solzhenitsyn, etc. Pero elijo estos dos por disciplina, por amor literario quien no quiere volver a leer esos cuentos de Gogol quien es capaz de escapar al embrujo de un libro viejo que tal vez no pueda nunca conseguir como el de Rodó.
Señalo a quien me acompaña allí iba a hacer teatro, allí tomaba mis cafés con buenas lecturas , Café La Paz, allí concurría a ver películas "Cine Cosmos ", más acá mi tío tenía un puesto de diarios y revistas pegado al cine teatro Premier. Todavía lo veo sonreir. Me conseguía libros, revistas, entradas para el Premier. Te quiero muchísimo tío Norberto. Un ser especial, porteñísimo, qué buena gente. Descendiente de calabreses.
Tantas cosas aprisionan mi ser cuando voy por Av Corrientes, un sentimiento de libertad, de felicidad, de noches inolvidables.Cines, teatros, noches felices, y por sobre todas las cosas libros. LIbrerías que sobreviven Galerna por acá, Hernández, Libertador, Kafka, Gandhi, Losada, Zival's , Jeckyll, Lucas, por allá.
La pizza, las luminarias eternas, la calle hermosa culta, combativa la librería Liberarte siempre en mí. Los cafés, los teatros, los clowns tipo Marcel Marceau...El Gato negro con su cafés mágicos y especias, la Giralda con el chocolate con churros de madrugada si es preciso.
Un viaje a la felicidad sin vuelta alguna.
Mi memoria y mi agradecimiento a librerías que ya no están por ejemplo Lorraine.Gracias por tanto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario