Buscar este blog

Mostrando entradas con la etiqueta Doors permanentes. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Doors permanentes. Mostrar todas las entradas

miércoles, 1 de junio de 2016

Doors permanentes, poesía de Mónica Pedraza






Doors permanentes



He aquí esta puerta y esta otra,
y el círculo trazado por los fieles,
y el dolor sublevado de los que buscan en la misa
un socorro, mitigar la pena,
Prendemos velas, nos encomendamos a algo que creemos
nuestra Fortaleza, Creencia, Protección.


Pero Juan
esta vez sólo piensa en su mesa de luz
en las pastillas
de esa mesa de luz,
acaso no sea tan terrible
cruzar el umbral
al fin de cuentas ¿ Qué ?.


Sabrina tiene una estampita que le tiembla en la mano
fue con su remera escotada,
mi madre me mata si sabe que vine así
piensa, se persigna,
el corazón le late a mil,
cómo le late la desesperación
desde que perdió su trabajo.


Cientos de historias
cotidianas, absurdas, terribles,
Por eso las puertas , doors permanentes,
que no dan a ningún lugar, que no puedes golpear,
no hay nadie, no hay nadie
para tu dolor Vera, con tu abdomen avanzado,
no hay crucifijo
que te absuelva de la desesperación...

Los escalones, las piedras,
los cantos devotos, las almas pudriéndose
en un paisaje divino, con inciensos varios,
Todo se oscurece, iluminémonos
permanezcamos unidos
mientras podamos,
abracemos el día como esta desazón,
quebrémonos al fin
porque esas puertas tiene Fin escrito en la madera,con sudor,
con angustia, con necesidades, con fluídos,
Manos que llegaron cerradas y corazones apenas entibiados
por una lejana lágrima consolatoria,
temblando en las pestañas

Vuela y resiste, toda fe permanece
adherida a un rezo expiatorio
que le compramos a los mercaderes de turno.


Mónica Pedraza