Gana Argentina un partido de futbol a Nigeria. La gente enloquece olvidándose que ayer se hablaba pestes del mismo equipo. Todo es tan light. Las opiniones tan volátiles...Tan poco tiempo sostenemos nuestros argumentos.
Más de lo mismo. En todas las redes donde vayas tetas y culos por todas partes. No hay erotismo hay idiotismo. Babosidad. Nada parecido a la galantería, a la preciosidad. Observo muchos perfiles.Qué lavado de cerebros. Los padres permiten que las hijas pequeñas muchas de ellas parezcan prostitutas en sus fotos.No hay un control de eso. Hay inducción a lo bajo lisa y llanamente. A lo ordinario, lo banal y lo de burdel.
Me encanta la seducción no me gusta el alarde de eso en fotos y fotos y fotos. Sesiones de fotos interminables para enganchar tipos que se dedican a la masturbación mental y de la otra clase. Los ratones no caminan por las redes.Vuelan.
En otras redes las mujeres haciéndose las cancheras, hinchas de futbol más berretas que un barra de cualquier equipo. Una se ufanaba de haber largado puteadas y haber escandalizado al jefe en la oficina. Glup. Trago saliva. Todo bien me gusta que gane el equipo de futbol pero de ahí a "volcar" directamente frente a compañeros de trabajo o tus jefes no va.
Un poco de compostura nos vendría bien. Del ridículo no se vuelve. Por ahí si ponemos toda esa euforia, esas ganas, esos deseos, esa energía en levantar el país que bien caído está lograríamos sacarlo adelante.
Como diría Rodrigo Cañete en su blog Loveartnotpeople
"Just a thought"
Puse esta foto en el blog, que es del modelo Honza Stiborek, fotografiado por Christina Fragkou (Backstage de la diseñadora Ann Demeulemeester) porque me recuerda esta mirada mía sobre las redes sociales y el comportamiento de la gente en ellos. Los miro sorprendida, divertida a veces y con rechazo muchas veces pero analizo esas conductas porque son sorprendentes y muy decadentes. No es que sea diferente al resto es que pienso si lo que estoy haciendo es lo correcto, si es sensato y bello nada más. Y porque quizás sea mi rebeldía fundamental en no parecerme al resto. Resguardar la persona ante todo.No ser aplanados por una igualdad masificante, ordinaria y vulgar.He ahí la diferencia. Nos vamos a pique como sociedad y como personas, no digan que no les avisé.
