Birgitt
La dimensión de los seres adquiere
algo fantasmal, algo rancio cuando se devela todo de ellos
y caen máscaras, y toda Verdad se eleva como una Luna
brillante, magnífica sobre el horizonte.
Acompáñame Birgitt a resucitar la fiesta inicial
en la que desposeídos, éramos dueños de la Alegría
y nuestro desconocimiento nos garantizaba al menos
un pétalo de fe en esta existencia.
Mónica Pedraza