"Desde muy niño descubrí que el escondite de la sabiduría estaba en los bares y que en las casas donde vivían las personas nunca había más que problemas malolientes, que la gente se deleitaba en generar. En buscar las soluciones a esos problemas consiste la maldita vida de la gente. Un día se dan cuenta de que la muerte los está acechando y envejecen sin vergüenza con la velocidad de un relámpago ".
Enrique Syms