Mamparas para aislarnos en una playa. A mí no. Prefiero mil veces morir contagiada en una playa alejada de todos (para que no digan que los contagio) que ver el mundo a través de un blindex.
Este mundo que se viene es harto horrible. Si ésto es el futuro prefiero un navajazo en la garganta. Poco estético, poco sensible, pulido, desodorizado,fumigado, plástico.
Prefiero pelar las papas entre varios como los de la pintura de Van Gogh antes que tomar el sol/descansar con vidrios en una playa.
Es un aburrimiento de sólo ver el mundo que vendrá si no detenemos esta peste con una vacuna. Restaurantes con separadores de vidrio mediante, barbijos fashion, máscaras, lentes, sacarse la ropa, ponerse otra ropa, lavar todo, desinfectar todo, qué espanto.
Ni en nuestras peores pesadillas soñamos con este horror.
Yo y el barbijo: ni lo soporto 15 minutos, que necesito aire. Una tortura de estos tiempos de pesadilla.Ni hablar de estas mamparas desoladoras en la playa.