La aceptación , el reconocimiento de nuestros errores, cuando uno deja de luchar, cesa contra la corriente que viene densa es cuando la Vida fluye. Y todo empieza a iluminarse por fin...Cuando uno reconoce acá me equivoqué, esto tengo que cambiarlo, en esto tengo que cambiar la estrategia, es como un despertar, no es que estuviste dormida/o es que luchabas contra obstáculos o trasladabas la culpa afuera, o pensabas más en los otros y menos en ti misma/o,etc.
Luego viene la acción o no depende qué, acepto, reconozco lo mío y lo del otro, lo de los otros, la acción: corrijo, hago lo que tengo que hacer, dejo que el Tiempo pase y todo salga a la luz, a veces uno debe continuar con su camino porque el otro no está en nuestra misma vibración, necesita de más tiempo para madurar y entender, contribuir desde nuestro lugar con nuestra autoexigencia de mayor responsabilidad con todo.Nadie puede entender lo que no vivió.
Revisar, aceptar, no es que dejaste de intentarlo es que justamente vas por más pero de otro modo, porque hasta ahora lo que dijiste no llegó, lo que hiciste no sirvió, lo que dejaste de hacer no contribuyó, no sirvió el grito, ni el enojo, ni la acusación, ni el silencio, ni siquiera el Amor que pusiste, hay que poner más pero resguardándote, cuidándote, y teniendo como eje central a vos mismo/a. Porque se parte del amor propio para poder amar bien al otro, jugar a nuestro favor esta vez porque hasta ahora jugando para los otros no resultó.
La última vez que tuve que enfrentarme con una decepción familiar me sorprendí por un lado me dio enojo es cierto como siempre injusticia pero ya no me dolió porque supe que ahora luego de varias decepciones con esa persona, que alguna vez fue muy cercana a mí me di cuenta que estuve irreprochable, generosa, amorosa y que no importa lo que ella hizo se acabó mi tiempo de hacer para ella, es mi tiempo, en este caso yo no la perdí, esa persona me perdió a mí y totalmente. A mi hermana no le cabe ésto, ella quiere sacar agua de donde no hay, somos diferentes ahí, yo doy, no pido, yo amo no exijo amor, quien me quiera acá estoy, quien me ame aquí siempre estaré, no me cabe exigir lo que al otro no le nace, por eso es madurez dejar ir lo que no quiere estar en nuestra vida, sé que se va a dar cuenta porque sabe que la quise muchísimo, que venga ella a mí y me diga, haga,haga, haga, no more, es sano. La familia es mi familia pero...Allá ellos.
Aceptar es aceptarnos y dejar de pensar que lo exterior puede llenarnos, no más expectativas. Realidad mejor...