Buscar este blog

martes, 24 de agosto de 2021

El silencio


Hoy murió Charlie Watts, batería del grupo Rolling Stones. Siempre me pareció de 10 su elegancia, su contención. Un baluarte del grupo no sé si podrán reemplazarlo (no podrán nunca).Y no sé si vale seguir con los Rolling Stones si ya no está uno de los esenciales (opinión mía). Creo que siempre hay que irse en medio de la gloria no en la decadencia. 

El silencio de los que nos faltan ya sea por COVID, cáncer, ataque al corazón... es estruendoso. Los otros días pensaba en mi tía Elsa y me puse triste de sólo pensar que nunca más nos moriríamos de risa comentando cosas. Alma mater de mi familia paterna. No se la puede reemplazar. Y por eso la familia está disgregada, murió papá, mi Abuela Adela, Elsa que eran los más convocantes así que olvidate. A veces intentamos encontrarnos en grupos (con lo del COVID todavía más en grupos pequeños) pero son el 10 % de lo bien que la pasábamos antes. Son lindos encuentros de familia pero obvio nos falta gente querida. 

Entre el COVID y el paso del tiempo va la estaca en el corazón. Seguiremos perdiendo gente o nos iremos muriendo obvio. Ahora se nota más que antes. Nos pasó una tanqueta por el espíritu más que por el cuerpo (éste por suerte y por los genes se la recontrabanca) pero lo otro nos hace percha. Y no se puede disimular.

Eso del silencio que nos ensordece, es el amor que les teníamos y no está y el amor que nos dieron (uffff muchísimo estos tres familiares míos fueron muy generosos conmigo) no vuelve más. No nos regocijamos con el dolor pero sí es justo reconocer nuestra impermanencia heracliteana. Ser vulnerable es ser humano.  


(Art by Daniele Richard) 

 


       

No hay comentarios:

Publicar un comentario