Escapar. Del bosque de sombras. De las figuras averiadas que la luz proyecta sobre la pared. Del delirio de la gente que mira celulares como si rezara un rosario. De la violencia enorme que acumula una sociedad desbordada de consumo y vacío.
Escapar de las reglas y de las convenciones. Ser original. Tan original como puedas. No cederle un ápice a las críticas al malhumor a la envidia a la grosería lisa y llana.
Pararse lenta y soberanamente. Porque hay un mañana y tiene tu nombre. Porque el cielo espera un combate en el que dejes vencidos y desvencijados todos tus fantasmas y pesadillas.
Alguna vez ser fuerte. Y amarse de veras con un amor de siglos. Mirarse sin horror, Cuidarse. Protegerse. Aceptarse.
El sol es para todos. Para justos e injustos brilla. Un exhuberante país de sueños espera para el que se atreva.
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