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viernes, 15 de mayo de 2020

Leonard Cohen - memories

Foucault se haría un festín...









Foucault se haría un festín con ésto del control, el poder, la autoridad, el encierro, la obediencia,la disciplina... Tiempos nuevos horribles para mi gusto pero con los que hay que lidiar. Obedezco sólo lo sanitario.No al microchip. Maldita pandemia.


A mí que me gusta el misterio (ese espacio en el que defendemos con uñas y dientes la esencialidad de nuestro ser) es terrorífico.Todo el tiempo ofertas me llegan de Zoom, chats hasta con 50 personas, meet no se cuánto, salas de boludeces... ¿ Para qué quiero eso ?. No soy empresa. Soy persona. No quiero ser masa ni fundirme en la muchedumbre. Soy sociable y siempre he sido y soy un éxito en sociedad con eso de ser querida, admirada, etc. De chica llamo la atención. Pero muchas veces me encanta ser inadvertida, como un fantasma y adoro la música tanto como el silencio. Eso de que conozcan hasta el calzón que usás es tan poco elegante, tan mersa. Que no sé como la gente le encanta mostrar TODO. Todo para que si ven tu casa te saquen el cuero a rajatabla. Que si te ponés en bikini que si estás gorda, que si estás en hueso, que se te ve...que no mostrás nada. Bah. Gente que no tiene vida y se hace la suya con la vida de otros.


El mundo se ha vuelto tan masa que asusta y me da asco. Para colmo esta pandemia multiplica ésta masividad. Ahora están con el Tik Tok y toda esa parafernalia de pelotudeces. Todos en eso, el límite de la sensatez y la boludez es finita.


El silencio, la sabiduría se han vuelto un lujo. ¿ Cómo queremos sanarnos y estar bien de salud así ?. Necesitás paz, calma para escucharte a vos misma /o que es la voz más interesante que tenés que escuchar. Cabalgar el tigre. Eso.

No es que no te metas en el barro y te diviertas. Pero un rato luego a lo tuyo, a la esencia de las cosas. A la Naturaleza, a recuperar nuestra sanidad con ella que es la gran maestra.


jueves, 14 de mayo de 2020

Estos ya 50 días alteran la experiencia del tiempo..., Amelia Valcárcel







"Estos ya 50 días alteran la experiencia del tiempo. Bergson, el filósofo que más trató el tiempo como vida vivida, es una buena lectura. Este tiempo está entre paréntesis y tiene probablemente gran parecido con el tiempo de los no lugares, como los monasterios. Leo y recomiendo el Decamerón, cómo escapar de aquella peste fundando una convivencia que sólo tiene el placer y la salud como fines. Es un libro profundamente nuevo, que esparce humanismo inmanente, de modo que no es extraño que haya estado en el Índice de Libros Prohibidos. Si se quiere entrar más en el tema de la peste, lo mejor es Defoe, El diario del año de la peste. Y para entender todo el contexto, la obra asombrosa de Delumeau, El miedo en Occidente. Y agrega: «Ni es nuestra primera peste ni será la última y todas nos vienen siempre por la Ruta de la seda".

Amelia Valcárcel (de Diario el Mundo ,España, 11 de mayo 2020)

Desorden











Por la calle me encontré un par sin barbijos.Uno que venía en el camión y me piropeó y me tocó bocina. En vez de ponerse el barbijo se hizo el galán. Yo iba hecha percha :una campera azul de plumas inflable pero finita (hace frío hoy), barbijo azul, jogging negro y zapatillas negras. O sea nada sexy. Nada que llame la atención. Pero los tipos siguen fatales, otro de frente sin barbijos. Otro en el auto con el barbijo de costado, se lo sacó, lo tenía colgado de una oreja. Mirones, piroperos, tocando la bocina, patéticos, etc. Gracias por hacer caso de los consejos sanitarios. UN desastre. Ves la TV y en el Conurbano de terror La Matanza también un par sin barbijos y haciendo fuck you con sus dedos. Gente a full así no se puede. No se puede con gente así. Si nos contagiamos acá en CABA y en el conurbano ya saben que pasó. El tema es que no hay vacunas. Así que todo ésto que cuento es criminal.



El fin de semana en Mar del Plata la gente se lo tomó como paseo, tomando helado.Una acumulación de gente de terror en la calle Güemes , que es la calle top de MDP. Pero así no funciona con la tregua. Fue tan evidente que el Intendente de la ciudad tuvo que dar marcha atrás con el permitido.

Y así no aprendemos. Es una pandemia pero parece un jolgorio apenas nos "abren la puerta ". Y eso que soy rebelde pero respeto las indicaciones de los que saben. Por algo nos indican que no salgamos seguido, que no nos expongamos porque sí y que usemos barbijos. Lo de ellos no es rebeldía es estupidez y exponen a los demás al contagio.

LO que no entiendo es que se abran joyerías como si fuera esencial (es una joda ¿ no ?) y no zapaterías, indumentaria y peluquerías en CABA. Necesitan trabajar con protocolo pero necesitan trabajar.

No sé que va a pasar en breve pero que así no va, no va. La economía sigue cayendo mal. Pero mal.Es fuerte todo pero te indigna la gente de siempre que es boba, que no aprende ni aún con una plaga como la que tenemos.






miércoles, 13 de mayo de 2020

Merodeadores del abismo








Merodeadores del abismo



Yo fotografío grietas
y trizas

tú fotografías trizas y grietas

dónde se nos fue la vida
en sangre y esperanzas


y él fotografía sus días sin sol
y las fisuras
del alma
que son letales.


Y nos fotografiamos
ya sabes,

Ellos se fotografían al filo
de una montaña
y es bella
hace sol
pero no deja de ser un precipicio


Y un día entendemos que de eso
no se sale,

sino herido, partido,fragmentado,
quebrado,
magullado,muerto.


Mónica Pedraza

ph: inthisrealityorinanother

martes, 12 de mayo de 2020

Pedernera, poesía de Mariano Rolando Andrade








Pedernera

Se tambaleaba al final de sus días
que ignoraban casi todos
salvo el último amigo el único
que intentaba devolverlo
a los tiempos en que partían
al amanecer —¿o era al ocaso?—
desde Temperley a los bosques
en la pampa de Brandsen.

Hijo del ferrocarril, Pedernera.
Se tambaleaba y nadie lo veía
de su boca no salía queja
solo el silencio del cuerpo roto
que él conocía y también
su último, su único amigo,
y algunos otros vislumbraron
sin coraje para acompañar.

En la casa del pastizal sin ciruelo ya,
hijo del ferrocarril, Pedernera
saludó una tarde de verano
a esos que lo dejaron ir
antes de que realmente partiese,
y al ocaso —¿o era al amanecer?—
huyó de Temperley a la pampa
como si no hubiese muerte.


Mariano Rolando Andrade

Pena y euforia










Pena y euforia


Un día sigue a otro
y sigue a otro,
y en ese mismo estertor de emociones
llega el frío


Por ahí alguien anda preguntando
por un caballo loco y salvaje
que nadie ha visto en el pueblo.
Los que duermen son eternos
de alguna manera
pero ahora la gente está insomne
y ya no sueña.


Es un tiempo distinto
el que se queda en las venas,
a veces da pena
desesperación
otras euforia
alegría exaltada
y no hablo de drogas,
hablo de personas.


Mónica Pedraza

(ph:Tyson Monson)

Pero sonrío porque tengo la cartera llena de libros..., Bohumil Hrabal










Pero sonrío porque tengo la cartera llena de libros de los cuales espero que por la noche me expliquen algo sobre mí mismo, algo que todavía desconozco.

Bohumil Hrabal.

lunes, 11 de mayo de 2020

Película "Coronación " de Silvio Caiozzi







La película " Coronación " es un film chileno del año 2000. Dirección Silvio Caiozzi.

Guion
Silvio Caiozzi (Novela: José Donoso)
Música
Luis Advis
Fotografía
David Bravo


Sinopsis/Argumento

Enormes árboles rodean una antigua casona, generando un ambiente húmedo y gris. Aquí reside doña Elisa de Ábalos (María Cánepa), una adinerada anciana de avanzada demencia senil. Fuera de las dos sirvientas que mantienen la casa impecable, la vieja sólo tiene contacto con su nieto Andrés Ábalos (Julio Jung), un burgués solterón y vejete de heredada fortuna que de vez en cuando la visita. Estela (Adela Secall) es una campesina de apenas diecisiete años que ha llegado a cuidar a la veterana Elisa. Preso de emociones que nunca había sentido, don Andrés se avergüenza de la fuerte atracción que Estela comienza a producirle. El caballero no consigue evadir sus conflictos internos, que aumentan hasta llevarlo a comprender que su vida ha sido un gran desperdicio. Andrés deja de lado sus libros y comienza a acosar a la muchacha en forma torpe e infantil. La atemorizada Estela se refugia en Mario (Paulo Meza), un humilde y pícaro soldador que trabaja en un taller del barrio. (FILMAFFINITY)

Reparto

Julio Jung, Adela Secall, María Cánepa, Gabriela Medina, Jaime Vadell, Myriam Palacios, Paulo Meza, Luis Dubó, Gloria Münchmeyer, Delfina Guzmán, María Izquierdo, Jaime Celedón, Rosita Nicolet


La película se basa en la obra del mismo nombre del escritor José Donoso.


El director pone el acento en esa casona decimonónica. Fantasmal, triste, oscura. Ese interior contrasta en forma determinante con el afuera. Todo está venido a menos. El jardín es un anticipo de lo que encontraremos en la casa.Siempre digo que el estado de una casa es el estado del alma de las personas. Y ahí en ese caserón hay mucha tristeza, mucha negra noche.Es la cárcel de Andrés pero también es un par de rejas autoimpuesta para no percatarse del afuera. Es débil para enfrentar la realidad. Es un personaje más literario que real.La casona familiar es un nido pero con dientes.No hay felicidad allí.

Los habitantes: Doña Elisa, mujer enferma loca que vive de recuerdos. Misiá Elisa (como le dicen) tiene dinero, es asistida por Estela y por un par de mucamas. La visita su nieto Andrés, un hombre muy mayor, tímido. Inseguro, que siempre le ha costado manifestarse sentimentalmente. No conoce la sexualidad sólo por fotos, por morbosidad. Se enamora de Estela que es bien menor que él y de otra clase social.Es un hombre casi castrado por su adoración y sumisión a la anciana dama que es su abuela. Ambos están tristes, melancólicos. Podremos conocer a Andrés en sus borracheras escasas ahí en ese estado se libera y podremos saber que lo agobia, lo aqueja. Sólo alcohol mediante puede madurar, querer cambiar aunque sea un rato su situación de solterón virgen. Andrés colecciona bastones todo un símbolo también de inestabilidad, de inseguridad. En la primer parte de la película Andrés vive en otra casa fuera de la casona familiar. Quiere ser libre, lo intenta. Pero es un gesto. La represión que representa la figura de su poderosa Abuela lo termina subyugando, atrayendo y lo atrapa.


El afuera: la realidad,la calle. Es el espacio de la demostración salvaje, sexual, amorosa. También es el espacio de los humildes, de los bandidos. Los postergados, los que desean vivir en la casona porque viven como en unas villas rústicas no viviendo sino sobreviviendo. Un ejemplo muy certero es la nueva casa del amigo de Andrés, el médico de familia. Tecnológica, perfecta y las pobres maderas en las que vive la cuñada de Mario y sus hijos.


Las clases: La alta burguesía ya decadente, la clase bien baja. El contraste entre la vivienda, estilo de vida, cultura, modo de hablar.

Decía William Blake que lo que se estanca se pudre, engendra peste. Andrés no es un hombre hecho y derecho porque siempre ha cercenado/reprimido su sexualidad. Y eso lo tiene agobiado, triste, amargado. Es muy lúcido sin embargo y no soporta los amoríos, quiere algo total no aventuras. Se diferencia de los de su clase chismosos, snobs y aventureros.Gente superficial.


La casa, Andrés, Misiá Elisa, las criadas viven de recuerdos, de un tiempo que ya fue. Incluso en su creer en el otro, en cierta moral que les impide ver , defenderse de lo que ya es, la realidad.Esa realidad que no pueden ver bien los va a atropellar y herir. Los lumpen, las clases bajas se atreven a entrar en esa casona para robarles utilizando la ingenuidad de Estela. Estela es sensual, viene del campo pero es buena persona nada que ver con su novio Mario y el medio hermano de éste todo un delincuente.La "casa tomada " cortazariana tiene ecos acá también.


Lo esperpéntico se da de continuo en esa mansión con los delirios de Misiá Elisa y con el festejo que le propician las criadas, al final, a su ama casi un fantasma de la casa.

Título: Coronación es el evento dentro de la casa, la fiesta que le dan las criadas a doña Elisa, la "coronan ". Lo bizarro, esperpéntico, lúdico se da en esta peculiar coronación a la reina de la casa.


Impecables actuaciones de Julio Jung (Andrés),María Cánepa (Doña Elisa) y Jaime Vadell como Carlos , el médico amigo de Carlos. Me gustó mucho su papel de hombre light y consumista.


Multipremiada película :Nominada por el Gobierno de Chile a “Mejor Película Extranjera”, Premio OSCAR, USA (2000)
Mejor Director, Festival de Cine del Mundo de Montreal, Canadá (2000)
Mejor Película, Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, España (2000.)
Mejor Actor, Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, España (2000.)
Mejor Guion, Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, España (2000.)
Mejor Película Premio Asociación Internacional de la Prensa, Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, España (2000.)
Mejor Película Premio “Radio Exterior de España”, Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, España (2000.)
Mejor Película, Festival de Cine Latinoamericano de Trieste, Italia (2000), etc.




Es un film largo pero lírico, esperpéntico. A veces de terror, romántico a full , psicológico y a la vez realista.


Recomendado


El final del film es un lujo. esos diálogos Abuela/nieto.

A WHITE, WHITE DAY - UK Trailer - Peccadillo Pictures