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sábado, 12 de marzo de 2016
¿ Qué hay con el Tiempo ?.
¿ Qué hay con el Tiempo ?. Ese cercenador de vidas, ese anciano seductor.
Tiempo para elegirme inocente, aún. Y festejar que puedo mirar todo con la transparencia con que miraría un niño.
Tiempo para deslizarnos por la pendiente del Amor, y reirnos fuertes porque mañana será otro día y tal vez no sea posible volver a amarnos así.Nos queda tan poco my Dear.
Tiempo que le falta a quien se va de esta Vida, y ojalá hubiera una transfusión de Vida, yo le daría la mía, compartiría mi soplo vital con otro, le daría este fuego.
El Tiempo en qué decidimos encontrarnos y que nunca fue porque vos no creías en el Tiempo, ni en mí, ni en nada.Y nunca te bastó nada y siempre me viste mal y a destiempo.
El Tiempo interno, el de mi cuerpo, con sus grandezas y pequeñeces, cada arruga es un paisaje, dejar que el Tiempo magnifique cada instante que he vivido, que lo transforme en himno.
El Tiempo para generar paracaídas y salvar gentes, hacer confortable un mundo que se autosacrifica constantemente y se pierde en carnicerías, bombazos, compras de celulares, vanidades.
EL Tiempo que pasé con mi Padre, con mi nonna, con amigos y amigas que no están, recuerdos vanos e imprecisos de todos ellos, nunca completos, nunca perfectos, la memoria es un cuadro desdibujado.
Tiempo para gastar y mirarme en tus ojos, nunca pude. Me quedabas tan lejos. Cuántas veces soñé que te abrazaba tan cerca.De mi corazón amante, de mi piel afiebrada, de mis latidos.
EL Tiempo de un niño para aprender, para crecer, para ser. Madurar, ¿ Alguna vez dejamos de ser niños ?.
Tiempo para mojar los pies en un largo río y dejarse llevar. En una tarde de verano, en un pueblo pequeño, amado.
Pablo Neruda Soneto LXIX
Soneto LXIX
Tal vez no ser es ser sin que tú seas,
sin que vayas cortando al mediodía
como una flor azul, sin que camines
más tarde por la niebla y los ladrillos,
sin esa luz que llevas en la mano
que tal vez otros no verán dorada,
que tal vez nadie supo que crecía
como el origen rojo de la rosa,
sin que seas, en fin, sin que vinieras
brusca, incitante, a conocer mi vida,
ráfaga de rosal, trigo del viento,
y desde entonces soy porque tú eres,
y desde entonces eres, soy y somos,
y por amor seré, serás, seremos
Pablo Neruda
Aleteia, Alétheia, la Verdad es una sola.
Fragmento de " El Rey Lear " by William Shakespeare
" ¡He aquí la excelente estupidez del mundo; que, cuando nos hallamos a mal con la Fortuna, lo cual acontece con frecuencia por nuestra propia falta, hacemos culpables de nuestras desgracias al sol, a la luna y a las estrellas; como si fuésemos villanos por necesidad, locos por compulsión celeste; pícaros, ladrones y traidores por el predominio de las esferas; beodos, embusteros y adúlteros por la obediencia forzosa al influjo planetario, y como si siempre que somos malvados fuese por empeño de la voluntad divina! ¡Admirable subterfugio del hombre putañero, cargar a cuenta de un astro su caprina condición! Mi padre se unió con mi madre bajo la cola del Dragón y la Osa Mayor presidió mi nacimiento; de lo que se sigue que yo sea taimado y lujurioso. ¡Bah! Hubiera sido lo que soy, aunque la estrella más virginal hubiese parpadeado en el firmamento cuando me bastardearon. "
De El rey Lear, de William Shakespeare
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