El film "Siervos " (Služobníci)cuenta con la dirección de Ivan Ostrochovský. Película del año 2020.
Guion
Rebecca Lenkiewicz, Marek Lescák, Ivan Ostrochovský
Sinopsis La Iglesia Católica atraviesa un momento complicado en Checoslovaquia a principios de los años 80. El régimen comunista amenaza con destruir la institución y la somete a un estricto control, por lo que se ve obligada a aceptar ciertas restricciones relacionadas con la libertad de creencias y de expresión. El clérigo está dividido entre la "iglesia de las catacumbas", que mantiene el contacto con el Vaticano y con la prensa occidental, y la "jerarquía eclesiástica", que coopera con las fuerzas del poder y está representada por sacerdotes pertenecientes a la asociación "Pacem in Terris", cuya vida se extendió en el país desde 1971 hasta 1989. Este es el contexto en el que los jóvenes seminaristas Michal y Juraj tienen que decidir si mantenerse fieles a su vocación e idealismo o arrodillarse ante las presiones de la policía secreta. (FILMAFFINITY)
Música
Cristian Lolea, Miroslav Toth
Fotografía
Juraj Chlpík (B&W)
Reparto: Vlad Ivanov, Samuel Skyva, Martin Sulík, Milan Mikulcík, Samuel Polakovick,Vladimír Obšil, Zvonko Lakcevic entre otros.
Película sublime. Había visto el trailer y me había interesado. Verla completa es un espectáculo visual y espiritual.
Los siervos son los hombres de fe que deberían servir a Dios. Y no me refiero a un mero sometimiento sino a la necesidad de aceptar las leyes divinas en este mundo. El compromiso con el mundo divino. El tema central del film es que ni lo religioso , los asuntos que competen a Dios y sólo a Dios, queda fuera de las garras de un Estado opresor comunista. La ideología es un tanque de guerra que termina pisoteando todo lo que toca.
Ni la inocencia de unos jóvenes religiosos, ni la fe resistente de unos sacerdotes (los vaticanistas) que le dan batalla a la persecución de los que quieren a un pueblo ateo y servil a la camaradería política.
La fotografía es un elemento que tiene peso acá en el film, blanco y negro. Sombras, luz, cruces, campanarios, claustros, las vestimentas de los sacerdotes, la noche y el día. Este tipo de luz, de fotografía me hizo acordar al film Ida de Pawel Pawiloski. Maravillosa fotografía a cargo de Jurak Chlpík.
Años 80, Checoslovaquia. En el Seminario de Bratislava, los sacerdotes se debaten entre el miedo y el deber: El miedo acomete a los religiosos, la fe sirve para medir la constancia y la adhesión a la causa más noble. Pero algunos por pánico sirven de informantes del poder. Los que siguen el camino de Dios terminan mal.
La escena donde los monjes juegan a la pelota detrás de ellos la simbología comunista es didáctica y contrastante. En un país normal sería algo común y lógico que jóvenes se dediquen en sus tiempos libres a pasarla bien pero en el film sirve para contrastar lo opresivo del régimen. Que tuerce esos destinos a su parecer. Nada queda librado al azar, la palabra, los silencios, el exceso de silencio, la alegría, una simple charla, las miradas...No se permite disentir y yo diría ni respirar.
Desde que comienza el film no podés sentirte tranquilo, todo el tiempo es en tensión, terrorífico. Otro de los detalles a tener en cuenta a medida que el doctor Ivan (Vlad Ivanov) cumple con su misión su eccema (eso parece) va avanzando , lo va volviendo pura costra. La maldad en este caso, de algún modo toda esa perversión que comete lo acomete. Sale a la luz.
Cine de autor. Es cine para debatir, reflexionar y enamorarse del cine. Casi documental, el director aplica un realismo perturbador, cine político y un noir sin dudas ya verán porqué.
Muy recomendado