Los perros ladran a la luna
hay un cocido que quedó sobre la mesa,
el viento es un maldito que sopla en la cara
de los lobos
El pasiego vuelve de las nubes
del ajetreo del andar bien arriba...
El ganado pasta en la altura
aún no llega la nieve,
apenas el frío que enlentece los movimientos
de la vieja mujer
en el fogón.
Lee un libro
no importa cual,
las letras en la tapa
se han borrado.
Vivimos en un mundo perdido,
desolado, aislado,
Tal vez lo único que nos salve
es la brújula del amor,
la conciencia de las horas que pasan,
la templanza,
un vaso de agua y un pan caliente para el que llega a la puerta
y toca a la puerta,
el peregrino
de la fe
que se adentra en medio de las montañas
a encontrarse a sí mismo.
Mónica Pedraza
ph: Le petite basque.fr by Pinterest
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