Paisajes, el libro del Alma. Quedan en la retina, los puentes, la niebla, las playas, la infinitas playas donde te tendías a "morir" un poco, surfistas, mundo fashion...
Montañas, cimas, ascensos, descensos, llegás casi con taquicardia, nena no estás en estado, bodegas, catedrales, calles antiguas, bosques, cerezas, el sabor del sauco,cabañas,el Sur del Sur...
Frío, lluvia, tardes en Chiloé, peces, pilotes, casas sobre pilotes, navegantes, redes...
Círculos concéntricos donde te demorabas, mareos, desmayos, falta de oxígeno, el Tren de las nubes, morir para volver a ser, turistas, niños...
Sismos, jazz, zambas, música electrónica, yankis...
Densidades, regalitos, souvenirs, manjares, caipirinhas, pisco, noches, días, parques,mochilas, zapatillas, tus sandalias de taco y tus mínimas minifaldas...
La evaporación de los recuerdos como las olas terribles en Praia Brava, Florianópolis.
Viajar es morir un poco en cada viaje y renacer mejor en cada regreso...El Alma iluminada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario