Depende la mirada. Me acuerdo un libro clásico de los que estudiamos Filosofía alguna vez, Lecciones preliminares de Filosofía de García Morente. Y allí estudiábamos que uno debía ser como un niño para adquirir sabiduría. O sea siempre deslumbrado por lo que vamos a aprender. Esa era la actitud del verdadero filósofo. La mirada de un niño, como un despertar nunca como un desencanto.
Eso quise transmitir en mi foto.
La mirada y todas las miradas. La de la poeta, la de la teacher, de la crítica de cine, la periodista, la defensora de miles de causas, la de la actriz, la de la mujer, la del hombre, la del niño, la del amor, la de la Vida. Depende la mirada, como en la fotografía recortamos el espacio, lo hacemos nuestro. Depende la mirada es lo que sale, editamos el mundo en una mirada.
Y en los ojos cabe el asombro pero también la expectativa sino estaríamos muertos. No es que la Vida sobre es que hay Vida en todo. Hasta en una roca.
Depende de nosotros. Hacer de nuestra mirada un misil, una flor, una declaración de amor, una bienvenida o una despedida.
Atreverse a sentir a toda hora y en todo tiempo y lugar.
Feliz viernes feliz fin de semana. Gracias por leerme y seguirme.
Abrazo.
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